Castigar el odio?

Después de los trágicos sucesos de esta semana en Francia, volvemos a estar en la cuerda floja, nos sentimos acosados por las fuerzas de mártires muyahidines dispuestos a todo por nada…es una apuesta, y aquí nos encanta apostar. Volvemos a estar dispuestos a seguir cediendo en pos de la seguridad y gente como Sarko lo sabe and he´s loving it.

En la primera aparición después de la muerte del asesino de los tres niños , el pequeño Napoleón satisface a aquellos que no saben qué hacer con tanta libertad de decisión y determido a castigar a “aquellos que consulten sitios de Internet que hagan apología del odio y la violencia". Estas frases en el momento siempre suenan bien..pero como suele ocurrir, aquí hay trampa. Sí realmente quisieran prohibir a aquellos que hacen apología del odio y lo fomentan esperando réditos electorales y económicos, podrían prohibir el Frente Nacional Francés con una Le Pen desatada, también, en el otro sentido, pueden tener controlados a los imanes que hacen apología de la violencia (también la violencia de género) en sus Mezquitas, la única religión del estado es la laicidad. Pero, al menos lo primero, no lo van a hacer, y entonces nos preguntamos que se pueden considerar Webs peligrosas o grupos peligrosos, yo lo tengo claro, pero me parece que los gobiernos de derechas de media Europa no lo tienen tan claro, pondré un pequeño ejemplo de Españistan.

El día 5 de abril hay convocada una marcha atea por las calle de Madrid, en principio no me suenan altercados violentos de ultras ateos, aunque…no hubo casos de pedofil…no, perdón, eso es la iglesia, sigo que me pierdo, pues La Delegación del Gobierno anunció ayer su decisión de prohibir la marcha atea por su "evidente voluntad de provocación", olé. ¿Entonces podemos considerar que las organizaciones ateas serían un grupo de provocadores e incitadores del odio? Estamos a un atentado terrorista o a medio millón más de parados de comprobarlo.