La Guerra Emú

En la historia de Asutralia destaca un evento poco conocido como fue la Guerra Emú o también llamada la Gran Guerra Emú. Famosa porque el ejercito, armado con ametralladoras, fue la encargada de controlar la descontrolada población de estas grandes aves.

Todo comenzó cuando a los veteranos australianos de la Primera Guerra Mundial se les concedieron tierras en la parte occidental de Australia. El gobierno les conminó a incrementar la producción de trigo con la promesa de unos subsidios que no llegaron y con la continua bajada del precio del grano se prepararon para la época de la cosecha no sin amenazar con no recogerla. Ante tantas desdichas se sumaron unos veinte mil emus ávidos de trigo quienes además destrozaron las vallas permitiendo que se unieran al festín los temidos conejos.

El ejercito hizo acto de presencia pertrechados con ametralladoras que resultaron ser totalmente inútiles. Primero porque tenían un corto rango de efectividad y los emus, que no eran tontos, no permitían que se le acercasen mucho y cuando lo hacían mataban muy pocas aves. Incluso probaron la táctica de las guerrillas pero se hizo insostenible económicamente. Un mayor llegó a decir que los emus tenían la invulnerabilidad de los tanques frente a las ametralladoras, decía que a una división de emus no habría ejercito que le pudiera hacer frente.

Así las cosas se firmó una tregua pero los granjeros siguieron pidiendo ayuda ante la amenaza avícola. En un segundo intento se tuvo más éxito y se llegó a exterminar unos mil emus. Sin embargo el resultado no fue muy bueno y en años posteriores los granjeros volvieron a pedir ayuda militar pero sin respuesta. Ya era suficiente con una humillación debieron de pensar los jerarcas del ejército por lo que se continuó con el sistema de recompensar por las piezas abatidas que ya se venía usando desde 1923.

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