Hace mucho que no comentamos una película por falta de tiempo y material interesante. En este caso traemos una producción que a pesar de ser rematadamente mala lo es a propósito. Se trata de una parodia de todas aquellas películas de los cincuenta que mezclaban la ciencia ficción y el terror con un total desprecio y una falta de pudor bochornosa hacia ambos géneros.
La historia comienza con un científico hablando de ciencia con su mujer dentro de un coche. Ambos dicen la palabra ciencia varias veces para que nos quede claro que la ciencia es muy importante. Se dirigen a una casa que alquilaron para que ella pueda cocinar comida deliciosa a su marido y así éste pueda estar bien alimentado para hacer ciencia. ¿Qué ciencia? Ciencia de la buena. En concreto buscar un elemento radiactivo muy importante para la ciencia. Por la misma zona anda un tipo con malas pintas a la búsqueda de una cueva con un esqueleto escondido desde hace siglos y necesita ese elemento radiactivo llamado atmosferium para resucitarlo. Al mismo tiempo unos alienígenas rarísimos vienen de visita a la tierra pero se quedan sin combustible por lo que también se ponen manos a la obra para buscar dicho elemento. De este modo tenemos la trama servida para que se entrecrucen sus destinos en una batalla épica.
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El malo maloso. |
Tiene su punto ver lo bien que parodian un género con tantos fans. Con esas conversaciones pseudocientícas con términos metidos con calzador. Esas repeticiones constantes de frases como si los actores no supieran que hacer mientras el director no grita
corten. Los disfraces sacados del Chino Antonio. Unos efectos especiales dignos de un proyecto de ciencia de quinto curso. En fin, logra magistralmente mimetizar la serie B de aquella época. Si la imagen tuviera más grano y esos pelos que se cuelan en el proyector daría perfectamente el palo. El único defecto que le encuentro es que es demasiado larga. Normalmente estas películas solían durar muy poco, como mucho 75 minutos, por lo que se nota que le sobra metraje que usan eternizando algunas conversaciones y planos. Si no fuera por este detalle me hubiera parecido una obra de arte. Por otro lado la música está muy lograda y parece que hubieran copiado la partitura de alguna de aquellas mítica producciones aunque cansa un poco el temita indio que suena en algunas ocasiones. También logran imitar a la perfección cuando desaparece la música de repente con cortes abruptos de escenas.
En definitiva, una gran película para todos aquellos que disfruten con películas como La humanidad en peligro,
Robot Monster y todo aquello relacionado con Ed Wood.
Me encantan las anécdotas y esta tiene algunas:
- La mujer del científico salió en Eyes wide shut. Los propios actores, todos ellos con tablas, manifestaron que les costó bastante soltar el diálogo como si fueran actores amateur.
- El guión se escribió en cinco días y fue rodada en diez.